El día martes 3 de agosto de 1993, siendo las 20:00 horas aproximadamente, llegó a la Base Contrasubversivo N° 323 de Tayabamba, un anciano de 80 años de edad procedente del centro poblado mayor de Collay, quien nos informó lo siguiente, dijo: "Jefes, los terrucos han llegado al caserío de Collay, han ocupado la plaza y dicen que ahí van a dormir, son mas de 100 combatientes", luego el humilde anciano se retiró, en ese momento nos reunimos con el capitán "aguila" para hacer un planeamiento con la misión de hacer un cerco al mencionado cetro poblado mayor, le sugerí al mencionado oficial para iniciar el desplazamiento siendo las 22:00 horas, pero mi sugerencia no lo tomó en cuenta, él oficial y el burro Rentería optaron para iniciar el desplazamiento siendo las 01:00 horas, esa noche en la Base Militar quedó solamente 10 individuos de Tropa, así mismo todo el personal de la Policía Nacional se encontraba en alerta permanente para evitar cualquier sorpresa. Salió dos patrullas, la patrulla Alfa al mando del capitán "aguila" con 25 hombre de tropa y yo como el segundo mando, la patrulla Bravo al mando del suboficial "burro" Rentería, a quien se le dio la misión de tapar la ruta de escape hacía el caserío de Huarichaca, para tal fin él tenía que hacer un desplazamiento mas largo por la parte alta, mientras la patrulla del capitán "águila" se desplazó por la parte baja, ante la total oscuridad casi al tanteo nos hemos desplazado para tapar las rutas de escape, ocupando los puntos estratégicos, permanecimos soportando el frío intenso de la madrugada, aproximadamente a cuatro mil metros de altura sobre el nivel del mar; donde permanecimos camuflados entre magueyes, achupallas y pequeños arboles, esperando cualquier movimiento de los grupos subversivos en horas de la madrugada. En esas circunstancias siendo las 03:00 horas, la patrulla Bravo del burro Rentería se había perdido en el camino y aparece por una zona equivocada y muy peligroso, un centinela que se encontraba al borde del camino detectó movimiento de personal de grupo de personas hasta ese momento desconocido y nos alertó manifestando lo siguiente: dijo en voz baja "vienen mi capitán, vienen mi capitán" en ese momento el personal nuestro se encontraba con el fusil FAL cargado, con el selector de tiro en posición (R), así mismo el lanzacohetes RPG se encontraba listo para ser empleado, tal es así que por un error casi le disparamos a nuestras propias fuerzas, cuando el personal de Tropa ya estaba jalando el disparador, el capitán dijo "esperen, esperen, todo a mi voz" de esta manera permitimos que se acercaran un poco y les lanzamos el "Santo y Seña" a lo que ellos contestaron correctamente, gracias a la paciencia y buen tino del oficial se salvó la patrulla del burro Rentería, sino de cuantos muertos hubieras hablado de nuestras propias fuerzas, luego el capitán le recrimino duramente al mencionado suboficial por el tremendo error que había cometido, como justificación él dijo lo siguiente: "Mi capitán me he perdido en la oscuridad, no sabía por donde salir y aparecí sin darme cuenta en este lugar".
En los caminos de entrada y salida de los caseríos de Collay y Guachapita permanecimos bajo cubierta y abrigo soportando un frío infernal en la madrugada del verano serrano, cuando amaneció, ya no había ni un elemento del Partido Comunista del Perú Sendero Luminoso, una ves mas habíamos sido engañados, por gusto permanecimos soportando frío intenso de la madrugada. Los astutos terrucos antes de las 12 de la noche habían abandonado el Centro Poblado Mayor de Collay y se habían desplazándose al caserío de Huanapampa, en este lugar amanecieron bebiendo licor y contando sus victorias de un mes de operaciones en los diferentes distritos y caseríos de Ongón, Tayabamba, Huaylillas, Buldibuyo, Taurija, Urpay, Santiago de Chayas, en los caseríos como: Pachacrahuay, Arcaypata, Acobamba, Chunco, Huarichaca, Gochapita, Collay, Huanapampa, etc; en todos los lugares que menciono habían incursionado con éxito total. Los pobladores de la zona realizaban la tarea de informante de los terrucos, estos informantes en su mayoría siempre fueron ancianas y ancianos, siempre permanecimos engañados por ellos, por sus falsas informaciones no lo podíamos colgar para hacerles declarar por miedo a ser denunciados a los Derechos Humanos. Retornamos a la base militar con el resultado negativo. Aquella mañana cuando acabamos de retornar a la Base Militar, cuando el personal de las patrullas realizaban mantenimientos de armamentos, en esta oportunidad aparece una humilde anciana, y nos dice lo siguiente: "Jefes, los terrucos toda la noche han bebido en el caserío de Huanapampa, todos están borrachos, han amanecido cantando y dando vivas por el éxito de sus incursiones en todos los distritos de la provincia de Pataz, en estos momentos están durmiendo, todos sus armas están en el camino casi abandonados", en ese momento yo le sugerí al capitán para salir con 40 hombres de Tropa, caminando a marcha forzada hubiera llegado en una hora y media, pero el oficial no quiso saber nada de las operaciones contrasubversivas, quien me dijo "no, solo es un engaño de los terrucos, ellos ya estarán de retorno por la puerta del Monte con destino al distrito de Ongon".
En los caminos de entrada y salida de los caseríos de Collay y Guachapita permanecimos bajo cubierta y abrigo soportando un frío infernal en la madrugada del verano serrano, cuando amaneció, ya no había ni un elemento del Partido Comunista del Perú Sendero Luminoso, una ves mas habíamos sido engañados, por gusto permanecimos soportando frío intenso de la madrugada. Los astutos terrucos antes de las 12 de la noche habían abandonado el Centro Poblado Mayor de Collay y se habían desplazándose al caserío de Huanapampa, en este lugar amanecieron bebiendo licor y contando sus victorias de un mes de operaciones en los diferentes distritos y caseríos de Ongón, Tayabamba, Huaylillas, Buldibuyo, Taurija, Urpay, Santiago de Chayas, en los caseríos como: Pachacrahuay, Arcaypata, Acobamba, Chunco, Huarichaca, Gochapita, Collay, Huanapampa, etc; en todos los lugares que menciono habían incursionado con éxito total. Los pobladores de la zona realizaban la tarea de informante de los terrucos, estos informantes en su mayoría siempre fueron ancianas y ancianos, siempre permanecimos engañados por ellos, por sus falsas informaciones no lo podíamos colgar para hacerles declarar por miedo a ser denunciados a los Derechos Humanos. Retornamos a la base militar con el resultado negativo. Aquella mañana cuando acabamos de retornar a la Base Militar, cuando el personal de las patrullas realizaban mantenimientos de armamentos, en esta oportunidad aparece una humilde anciana, y nos dice lo siguiente: "Jefes, los terrucos toda la noche han bebido en el caserío de Huanapampa, todos están borrachos, han amanecido cantando y dando vivas por el éxito de sus incursiones en todos los distritos de la provincia de Pataz, en estos momentos están durmiendo, todos sus armas están en el camino casi abandonados", en ese momento yo le sugerí al capitán para salir con 40 hombres de Tropa, caminando a marcha forzada hubiera llegado en una hora y media, pero el oficial no quiso saber nada de las operaciones contrasubversivas, quien me dijo "no, solo es un engaño de los terrucos, ellos ya estarán de retorno por la puerta del Monte con destino al distrito de Ongon".
En el mes de julio y los primeros días del mes de agosto de 1993 se culminó una de las incursiones mas grandes que ejecutaron los combatientes del Partido Comunista del Perú Sendero Luminoso, incursionaron en siete distritos de la provincia de Pataz. Ellos nos pulsearon, según la información siempre quisieron vengar sus derrotas en el caserío de Asia con el resultado de 48 muertos de sus huestes, sus derrotas en el distrito de Chilia con el resultado 68 muertos, no se atrevieron atacar a la Base, cuando les perseguimos siempre escaparon como ocurrió en Arcaypata, como ocurrió en el distrito de Ongón, utilizaron a los campesinos como sus informantes.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario