LA 8VA DIVISIÓN DE INFANTERÍA DISTRITO DE LOBITOS PROVINCIA DE TALARA DEPARTAMENTO DE PIURA PERÚ

El distrito de Lobitos es uno de los seis que conforman la provincia de Talara, ubicada en el departamento de Piura en el Norte del Perú. Está situado cerca de la línea ecuatorial, cuenta con sol y frescos vientos que le brindan un gran clima durante la mayor parte del año. Por su ubicación en zona tropical la temporada de lluvias es entre los meses de enero, febrero y marzo. Por lo general durante los años de época normal en la zona no hay precipitaciones de lluvia, si las hay suelen ser muy leves; sin embargo, en algunos años se presentan lluvias fuertes (debido al Fenómeno de El Niño), ocasionando erosiones e inundaciones que cierran sus vías de acceso afectando las pistas sobre todo en el sector de Pariñas que deja incomunicado con el distrito de Talara y otras zonas del Norte del País. 

El distrito es pequeño y de escasa población, limita por el Norte con el distrito de Los Órganos, por el Este con el distrito de El Alto, por el Sur con el distrito de Talara, y por el Oeste con el mar de Grau, tiene una superficie de 233.01 Kmt2 y altitud de 20 metros sobre nivel del mar. El clima desértico del distrito de Lobitos se traduce en cambios de temperatura durante todo el día, en horas de la mañana y en las horas de la noche el frió y el viento es intenso. La temporada de vientos fuertes empieza en abril y dura hasta el mes de diciembre. Quien no recuerda que, en horas de la noche, durante el servicio de guardia se amanecía soportando el intenso frió y con el capotin de campaña empolvado por el viento que soplaba dirección Sur al Norte.

En el distrito de Lobitos, las instalaciones que ocupó la 8va División de Infantería, perteneció a la Compañía Petrolera Lobitos de empresarios ingleses que luego fue vendido a la I.P.C. de EEUU. Desde el año 1888 hasta el 9 de octubre de 1968, los gringos explotaron el oro negro de estas tierras sin ningún control y sin pagar impuestos al Estado peruano, en complicidad con los gobernantes traidores de las diferentes épocas, es por eso que existe hasta la fecha inmenso cementerio de los ingleses y de los Norteamericanos y que en estos momentos se encuentra abandonado cerca a los polvorines de esta Gran Unidad de Combate.

En la primera semana del mes de enero de 1985, llegué a este distrito, cambiado de colocación procedente de la 9na División Blindada de la guarnición de Tumbes, para laborar en el glorioso Batallón de Infantería Motorizado "Iquique" N° 31, bajo el comando del señor teniente coronel de infantería Jorge Ramos Varillas. Entre los principales barrios asentados sobre el desierto de arena seco se encontraban los siguientes barrios de civiles y militares: Barrio Bellavista, Barrio del personal de Oficiales, Barrio primavera, Barrio Zarumilla del personal de Técnicos y Suboficiales y el Barrio de Pescadores. Como consecuencia de las intensas lluvias del fenómeno de El Niño de 1982, en este distrito no había servicio de agua potable ni desagüe para toda la población, todas las tuberías se encontraban inservibles. 

Esta Gran Unidad de combate se encuentra ubicado en la orilla del mar, donde existen hermosas, tranquilas y limpias playas, algunas cuadras del personal de Tropa SMO se encuentra muy cerca, aproximadamente a 50 metros. En el distrito de Lobitos los gringos han dejado como recuerdo la iglesia "Sagrado Corazón de Jesús", que tiene más de un siglo de existencia y ha sido declarada Patrimonio Cultural de la Nación; a un costado se conservan aún las instalaciones de lo que fue el primer cinema de Sudamérica. En el año 1968 la 8va División de Infantería participa en la recuperación de la Refinería de Talara y quedó acantonado en el distrito de Lobitos, el personal del Ejército ocupó los inmuebles dejados por la I.P.C tras la expropiación hecha por gobierno patriota del General Juan Velasco Alvarado. La 8va División de Infantería participó en la Guerra de 1941 contra Ecuador, donde participó el Batallón de Infantería Motorizado "Iquique" N° 31, este batallón también participó en la Campaña Militar del Alto Cenepa 1995, para expulsar a las tropas ecuatorianas del Valle del Cenepa en Amazonas. En esta guarnición laboré desde el mes de enero de 1985 hasta el mes de julio del año 1992, (siete años y seis meses) de manera consecutiva. En aquellos tiempos esta Gran Unidad de combate contaba con los siguientes batallones de combate, batallones de apoyo de combate y Sub Unidades (Pequeñas Unidades): Batallón de Infantería Motorizado “Glorioso Ayacucho” Nº 3, Batallón de Infantería Motorizado “Iquique” Nº 31, Batallón de Infantería Motorizado “Tarapacá” Nº 17 (distrito de El Alto), Batallón de Infantería Motorizado "Piura" N° 32 (distrito de El Alto), Grupo de Artillería de Campaña Nº 8, Batallón de Servicios Nº 8, Batallón de Ingeniería de Combate Motorizado "Machupicchu" Nº 8, Compañía de Comunicaciones Nº 8, Compañía de Policía Militar Nº 8 y la Compañía de Comandos Nº 8. Desde el año 1992 hasta el año 2000 esta Gran Unidad de Combate participó en la Guerra Interna en Cañete, Barranca, Huacho, Chancay, su PC quedó establecido en Callao hasta el año 1995 y luego se traslado a Chorrillos.

Esta Gran Unidad de Combate perteneciente a la Primera Región Militar (PRM), en aquellos tiempos contaba con tres mil ochocientos hombres, entre personal de Oficiales, Técnicos, Suboficiales, Tropa Reenganchado y Tropa Servicio Militar Obligatorio, entrenados a tiempo completo para la guerra en el Frente Externo. 1985 fue una época muy difícil por la crisis económica y por el incremento de la violencia política; sobre todo, por la presencia de muchos combatientes del Partido Comunista del Perú Sendero Luminoso (PCP-SL), en los departamentos de Ayacucho y Huancavelica. En aquellos tiempos en la guarnición del distrito de Lobitos el personal militar y civil vivimos con escasos medios de comunicaciones terrestre y telefónico, muy lejos de la civilización moderna, aislados totalmente de todo adelanto tecnológico. Muchos Técnicos y Suboficiales se encontraban casi olvidados por el Comando del Ejército, algunos tenían mas de diez (10) años de servicios ininterrumpidos en esta Guarnición, este personal decía que se encontraban así porque la mafia que se encontraba en el JATSOE del Cuartel General del Ejército manejado por el Técnico Jefe EM Conchezuta y luego por el Suboficial de EM Hoyos Arteaga no le sacaban porque ellos pedían fuertes cupos para ser cambiados de colocación a otras guarniciones con categoría de ciudad. No sé en qué nivel de categoría habría estado esta guarnición ubicado a orillas del mar rodeado de un desierto seco, donde los medios de transporte terrestre escaseaba, donde la comunicación telefónica escaseaba, para llamar por teléfono en las noches hacíamos cola en pequeño local de Entel Perú, que se encontraba ubicado a un costado del Cuartel General de la 8va DI.

Himno de la 8va División de Infantería

Suena la alerta con el toque del vibrante clarín,                        

La 8va surge a la frontera defender,                                        

Aguerridos marchar, luchar                                                                 

con el lema vencer (bis                                                     

Triunfar por la nación.

Avanza agresiva a la guerra

Con honor y valor

Con su fuerza de golpe

Y sagrada misión

A combatir, a destruir

A nuestros adversarios

Derrotándolo hasta morir

8va División,

Muchos triunfos obtendrás.

Derrotando a tu rival feroz

Y dar la vida es tu deber

Lucharas con valor

Por tu hermoso pabellón

Y tus victorias son

Eternos triunfos son
Por la grandeza del Perú.

General de Brigada Luís Briceño Bizcara.- Cuando llegué como cambiado de colocación a la guarnición del distrito de Lobitos, provincia de Talara, departamento de Piura (Primera Región Militar), encontré al señor General de Brigada Luís Briceño Bizcara, como el Comandante General de la 8va División de Infantería, el mencionado General permaneció al mando de la División, durante los años de (1985 – 1986). El General arequipeño para muchos fue un demonio, sin embargo para mí fue el mejor o tal vez el único que se merece todo mi respeto, en sus dos años de mandato esta Gran Unidad permaneció con el personal de todas las jerarquías al cien por ciento entrenado para el combate en Frente Externo, los armamentos se encontraban en buen estado y vehículos de apoyo de combate en un 95% operativo; el control de rancho de la Tropa fue muy estricto, él mismo General, todos los días al medio pasaba revista de rancho en todos los cuarteles, si el rancho estaba mal preparado, mandaba botar y nuevamente preparaban el almuerzo y la cena, pero previa sanción al Comandante de Unidad y al Oficial de Rancho.

En aquellos tiempos en el distrito de Lobitos resaltaba las casas de los civiles, las cuadras del personal de tropa, alojamiento del personal de Oficiales, personal de Suboficiales y las Comandancias levantadas sobre gruesos pilares con sus paredes en base a tablones de madera de pino oregón.  A lo largo de su costa existía diversas playas en su mayoría con aguas y arenas limpias y muy tranquilas, algunas cerca de paredes de piedra o salientes de la tierra. Desde la parte alta donde se encuentra la bola metálica que es el símbolo o emblema del distrito se observaba las lindas playas y en los inmensos arenales a los famosos “zancudos” o “lukis” que día y noche extraen el petrolero crudo desde las profundidades. En el océano no pasaba desapercibido las inmensas plataformas marinas cuyas estructuras de moles de acero y madera enclavadas en el fondo del mar, en las noches más parecen una ciudad bien iluminada, siempre invadidas por incontables aves marinas y lobos de mar. Queda en el recuerdo que en las playa rocosa por el sector del Batallón de Infantería Motorizado “Iquique” N° 31, algunas ballenas hambrientas persiguiendo a los lobos marinos se quedaban atascados entre las piedras en las inmediaciones de la piscina; los animales por el gran volumen del peso quedaban varado, en esas situaciones la tropa corría con sus hachas y todo tipo de herramientas para trozar en pedazos el inmenso animal marino cuya carne serbia de alimento para todo el personal.

La revista de vehículos de apoyo de combate.- Para la revista de operatividad de diversos tipos de vehículos de apoyo de combate y administrativo en la plaza de armas del distrito de Lobitos, decretado por el señor General Comandante General de la 8va División de Infantería, normalmente el comando del Batallón de Infantería Motorizado “Iquique” N° 31, presentaba 48 vehículos, para tal fin el personal de mecánicos, todos los días jueves en horas de la tarde, en las inmediaciones de la guardia de prevención dejaban en columnas a los vehículos de apoyo de combate como: Camiones LA, Unimog, vehículos de Reconocimiento y administrativo. El día día viernes, siendo las 06:00 horas se prendían los motores y se iniciaba el desplazamiento con dirección a la plaza de armas, donde el mismo señor General y sus coroneles de Estado Mayor presenciaban la revista, el desfile de vehículos se llevaba a cabo delante de la Comandancia General; los vehículos se desplazaban lentamente con las luces prendidas y con sus respectivos banderines, desplazándose por el itinerario con dirección al Puesto de Control Avanzado N° 1, y se daban la vuelta por la carrozable que se encontraba por el sector del Puesto de Control Avanzado N° 2, cinco kilómetros de distancia aproximadamente, para retornar a sus respectivos cuarteles. Para mantener en buen estado de operativo a todos los vehículos, los mecánicos de vehículos a rueda y el mecánico electricista automotriz trabajaban toda la semana hasta altas horas de la noche, así logré ver a los Suboficiales Ventura Bautista Leónidas, Mejía Sánchez Adelicio, Ordoñez Vidal Víctor y Cueto Flores Paulino y Callalli Segovia, quienes eran los mecánicos en sus respectivas compañías; en estas situaciones los Comandantes de Unidad se esmeraban de la mejor forma para no quedar mal ante la superioridad.

La competencia de orden cerrado y desfile por Unidades.- En la 8va División de Infantería, acantonado en el distrito de Lobitos, provincia de Talara, todos los días sábado había competencia de orden cerrado y desfile en la plaza de armas, para tal fin a las 06:00 horas, los batallones y las Subunidades se desplazaban rumbo a la plaza de armas. Siendo las 07:00 horas, el G-3 (Oficial de Instrucción de la Gran Unidad) pedía parte y a las 08:00 horas, el mismo General pasaba revista al personal de Oficiales, Técnicos, Suboficiales y a la Tropa SMO, como si fuera una inspección, si alguna Unidad se encontraba mal alineado o no mostraban porte, inmediatamente rotaban a la cabeza con su Comandante de Unidad por la zona alta donde se encontraban “dos tanques metálicas en forma de bola”, estos tanques en forma de bola es uno de los principales recuerdos que han dejado los Yanquis, pues en estas inmensas "bolas" almacenaban agua dulce para toda la población. El recorrido de rotación de ida y vuelta que hacia el personal, aproximadamente es de mil quinientos metros de distancia (subida y bajada). Finalizado la revista comenzaba el desfile, este General fue tan exigente hasta en grados extremos, en la banda de músicos el Técnico 3ra Cecilio Farías Gonzales (saxofonista) era un cojito y aunque lo consideren paradójico este hombre durante el desplazamiento de la banda levantaba la pierna a la altura de la cintura, si los integrantes de la banda mostraban desgano en sus desplazamientos sobre todo durante el desfile también rotaban por el cerro con todo sus instrumentos en la mano. Ubicado la banda de músicos en el lugar que le correspondía, los batallones comenzaban a desfilar, algunas veces había hasta tres o cuatro vueltas, luego nuevamente ocupamos nuestros emplazamientos, todos sudorosos y empolvados; a continuación el maestro de ceremonia avisaba el resultado de las ubicaciones, siempre había un primer puesto y el último. Para la Unidad que ocupaba el último puesto no había salida de paseo para nadie, como castigo cubría el servicio de fin de semana en los puestos exteriores con todo sus Oficiales, Técnicos, Suboficiales y Tropa Servicio Militar Obligatorio, es decir en los puestos de PV-1, PV-2, PV-3 y el polvorín, ese era el castigo, este tipo de castigo nadie quería, sobre todo por el prestigio de sus Unidades por ende los jefes y todo su personal se esmeraban en todo. El año de 1985, durante el comando del teniente coronel de infantería Jorge Ramos Varillas, un día sábado del mes de agosto, pasamos mala revista y en desfile quedamos en tercer puesto, y este resultado no le gustó al mencionado comandante, finalizado el desfile al paso ligero retornamos al cuartel e inmediatamente nos ordenaron para formar en la orilla del mar, donde hay abundante arena fina, ahí todo el personal sin rancho del medio día comenzamos a marchar para sacar piernas, permanecimos marchando hasta las 15:00 horas, como es normal en este tipo de exigencias por ahí no faltaba personal de tropa desmayado, a este personal desmayado sin contemplación alguna inmediatamente le cogían de las extremidades y le aventaban al mar, cuando las olas le cubrían con toda su fuerzas este personal se levantaba y salía corriendo totalmente mojado, se sanaba por arte de magia, se integraba a su companía y seguía marchando.  

La permanencia de batallones de combate y de apoyo de fuegos en el campo de entrenamiento.- Los cuatro Batallones de Infantería y el Grupo de Artillería de Campaña Nº 8, siempre permanecían en el campo por las zonas de Talara Alta y en la zonas de Pariñas, realizando ejercicios de tiro con fusiles FAL, granadas, morteros de 80 mm, 120 mm y diversos modelos de obuses, donde también participé en mi condición de Oficial de Comunicaciones del Batallón de Infantería Motorizado “Iquique” Nº 31. En aquellos tiempos en este tipo de entrenamientos las comunicaciones alambricas e inalambricas siempre estaba presente apoyando a las Unidades de maniobras y de apoyo con los receptores y transmisores de Alta Frecuencia “HF”, Muy Alta Frecuencia “VHF”, Teléfonos Campaña TA-312/PT, Centrales Telefonicas SB-22/PT y cable de campaña WD1/TT. Con estos medios de comunicaciones se mantenía la Red interna y externa de manera permanente. Para estos ejercicios normalmente salíamos en horas de la noche del día domingo y retornamos en horas de la tarde del día viernes. Después de una semana de ejercicio de campaña, siempre se retornaba con el uniforme totalmente sucio y empolvado, como es normal en aquellos tiempos no había día libre para nadie, el personal de Oficiales y Suboficiales y Tropa, retornando al cuartel, continuaba con sus actividades administrativa e instrucción con total normalidad, algunos inmediatamente ingresaban al servicio de guardia y otros como oficiales de día.

La 8va División de Infantería se traslada a la ciudad de Lima.- En el mes de setiembre del año 1992, por disposición del Comando del Ejército del Perú, ante el incremento del accionar terrorista del Partido Comunista Peruano Sendero Luminoso en el ámbito de la jurisdicción del departamento de Lima, la 8va División de Infantería se trasladó desde el distrito de Lobitos, provincia de Talara, con destino a la ciudad de Lima, ocupando el local de STRANSA en el Callao, cerca al Aeropuerto Internacional Jorge Chávez. Los batallones de combate y de apoyo de combate entrenados para la guerra en el Frente Externo se convirtieron en batallones contrasubversivos; ergo, se dispersaron a diferentes provincias, por el norte chico entre las ciudades de Barranca y Huacho se ubicaron algunos, el Batallón de Infantería Motorizado "Tarapacá" N° 17 y el Batallón de Infantería Motorizado "Glorioso Ayacucho" N° 3, el Batallón de Ingeniería de Combate N° 8 ocupó el distrito de Chancay, lugar donde se encuentra hasta el día de hoy. El Batallón de Infantería Motorizado "Iquique" N° 31 se trasladó a la provincia de Cañete al sur de Lima, este batallón de aguerridos hombres de infantería participó en la Guerra con Chile en el año de 1879, participó en la Guerra de 1941 contra Ecuador, participó en la Campaña Militar del Alto Cenepa 1995 contra Ecuador, actualmente lo han convertido como un Batallón de Infantería de Selva (BIS) y se encuentra en el Estrecho en la frontera con Colombia, así mismo el Batallón de Infantería N° 3 a la fecha se ha convertido en Batallón de Infantería Selva N° 3, se encuentra en la frontera con Colombia. El Grupo de Artillería de Campaña N° 8  (GAC N° 8) el año 2013 por el problema limítrofe de mar con Chile se trasladó al departamento de Puno, donde se encuentra hasta el día hoy. El Puesto de Comando de la 8va División desde el año de 1994 hasta el año de 1995 permaneció en STRANSA Callao, y en el año de 1996 se trasladó al distrito de Chorrillos y ocupó el Fuerte Tarapacá.

La historia del Suboficial de 3ra músico militar Chapilliquen. Este suboficial era natural de bajo Piura, con mas de 35 años de edad se asimiló al Ejército, tocaba el clarinete. Como intégrate de la banda de músicos de la 8va División de Infantería en Lobitos ha dejado muchas anécdotas. Él era un civil uniformado, solamente tenía conocimiento básico de los reglamentos militares. En los años que laboré por el Norte del Perú, en aquellos años de constantes problemas con Ecuador, el penúltimo mes del año todos los batállanos de la región Militar del Norte procedentes de Trujillo, Lambayeque, Cajamarca, Piura, Sullana, Lobitos y del mismo Tumbes ocupaban sus sectores de responsabilidad en las líneas de la frontera comprendido desde la puta Capones y a lo largo de Zarumilla y realizaban maniobras militares como si fuera una guerra real, donde también participaba la Marina Guerra y la Fuerza Aérea, este tipo de ejercicios militares con todo el personal completo se realizó durante todo el gobierno de Belaunde Terry y en los primeros tres años del gobierno del doctor Alan García Pérez, luego por medidas de austeridad se anuló por completo en los dos últimos años del gobierno aprista; el abandono a las Fuerzas Armadas y falta de entrenamiento por medidas de austeridad se consolidó durante el gobierno del ingeniero Alberto Kenya Fujimori. 

En el mes de noviembre de 1985 cuando se desplazó todo el personal de los batallones de combate de la 8va División de Infantería a las líneas de frontera en Tumbes, los músicos militares ocuparon los cuarteles y cumplían la función de oficiales de guardia, y el suboficial Chapilliquen fue destacado al Batallón de Infantería "Iquique" N° 31 para cumplir la función de oficial de guardia, función que para él era una novedad, en una oportunidad cuando se encontraba de oficial de guardia, en horas de la madrugada había aparecido el comandante jefe de ronda, a quien él tenía que pedirle el "santo y seña" para que ingrese al cuartel, pero como no reaccionaba el sargento de guardia le dijo, mi suboficial pídele el "santo", pídele el "santo", pero nada que ver mas al contrario le había dicho: "adelante mi comandante a estas horas hace mucho frio, no quiere que le sirva un poco de café caliente", el oficial muy sorprendido disimuladamente habia sonreído pero luego le habia dado tremenda reprimenda...