Se ha cumplido 24 años de las Operaciones Militares del Alto Cenepa; en aras de la verdad los combatientes ecuatorianos, como soldados veteranos que son, deberían reconocer que en el Valle del Cenepa palearon en territorio invadido, pelearon engañados por los altos mandos y de la clase política de su país. Por favor no celebren falsa victoria, reconozco que resistieron bien, demostraron valor y moral en defensa del territorio que no les pertenecía, es cierto que no abandonaron la cota 1061, en ese lugar que ustedes bautizaron con el nombre de falso Tiwinza, ahí terminaron arrinconados. La Misión de Observadores Militares de los países garantes les salvó de una derrota total. Estamos en tiempos de paz; por ende, en mi condición de Combatiente, calificado como Defensor de la Patria, felicito a los combatientes de ambos países por el encuentro binacional de Veteranos de Guerra, la paz es el camino, las ceremonias conjuntas y las visitas entre Veteranos de Guerra que sea para siempre.
Desde los tiempos de su independencia Ecuador en su deseo de acceder con soberanía al río Amazonas, pretendía anexar a los departamentos de Tumbes, Jaén y Maynas. Con los argumentos de siempre, el 5 de julio de 1941 atacó a las fuerzas peruanas en la frontera Norte, como respuesta las tropas peruanas ocupan la provincia de El Oro, Macará, Loja, Zamora, Chinchipe y otros. Intervienen como mediadores de Paz, los Presidentes de Argentina, Brasil, Estados Unidos de Norte América y Chile. Los países garantes, posteriormente trabajaron para organizar un acuerdo de paz y retiro de las fuerzas peruanas del territorio ocupado. Las negociaciones se abrieron en Río de Janeiro a inicios de 1942 y produjeron un Protocolo de Paz, Amistad y Límites, firmado el 29 de enero de 1942. Perú victorioso en dicha campaña militar, por la decisión política de la época le regaló a Ecuador la provincia de Sucumbíos, ubicado en la región amazónica, actualmente es una de las principales provincias que proveen al Estado ecuatoriano del petróleo que exporta.
En
el mes de enero del año 1978, las tropas ecuatorianas se infiltran al territorio
peruano en el sector de Alto Comaina, sub sector de la Cordillera del Cóndor, resultado, victoria del Ejército peruano.
La
tensión acumulada entre Ecuador y Perú originó el Conflicto del Falso Paquisha en
la Cordillera del Cóndor en el mes de enero del año 1981, con ataques de helicópteros
y aviones de combate Perú salió como triunfador en el campo militar. Derrotado
militarmente, Ecuador acude a la OEA donde también sufrió una derrota
diplomática, esta organización se rehusó a adoptar el papel de pacificador en
la disputa, recomendando a los países garantes hacer cumplir el Protocolo de
Rio de Janeiro. Hay que tener en cuenta que en el año de 1952 el gobierno
ecuatoriano declaró la nulidad del Protocolo del Rio de Janeiro, desconociendo
a los cuatro países garantes en calidad de tales. En el año de 1981 como
enmendando sus errores se vio forzado a apelar a los países garantes, con la
denominación de “cuatro países amigos”; por ende, en busca de apoyo diplomático
para contener a la firme posición del Perú.
El 29 de enero de 1995, en el Valle del Cenepa, Amazonas, el capitán EP Luis García Rojas, piloteaba como guía voluntario el helicóptero MI-8T Nº 587 no equipada para atacar las posiciones del enemigo, la nave fue impactado por un misil tierra-aire IGLA, disparado por el subteniente ecuatoriano Hernán Cáceres.
El 29 de enero de 1995, en el Valle del Cenepa, Amazonas, el capitán EP Luis García Rojas, piloteaba como guía voluntario el helicóptero MI-8T Nº 587 no equipada para atacar las posiciones del enemigo, la nave fue impactado por un misil tierra-aire IGLA, disparado por el subteniente ecuatoriano Hernán Cáceres.
En el Valle del Cenepa, en defensa del territorio peruano, ofrendaron su vida 90 combatientes, en su mayoría perdieron la vida por efectos de la mina antipersonal sembrado por las tropa de Ecuador en todas las trochas, y 836 combatientes salieron heridos y enfermos.
El
28 de febrero se firmó la Declaración de Montevideo que dio fin a la fase
militar. La diplomacia culminó con la firma del Acuerdo Global y Definitivo el
26 de octubre de 1998.
Cerrada
la frontera, el escenario hoy se presenta totalmente distinto. De la
desconfianza por la enemistad con el ejército vecino, se ha pasado a la
cooperación para el desarrollo conjunto de las naciones.
La
superación definitiva de las diferencias limítrofes a partir del Acuerdo de
Brasilia 1998 ha dado paso a una etapa de fortalecimiento de la cooperación y
la confianza, algo que ha quedado estructurado con el Gabinete Binacional que
se celebra anualmente desde el año 2007. Este hecho histórico debe ser
celebrado en todo el país con el reconocimiento y la trascendencia que merece,
porque dio fin a un siglo y medio de conflictos y abrió el camino a relaciones
de paz sólidas y cooperantes tal vez para siempre.
El
26 de octubre de 1998 los presidentes Alberto Fujimori y Jamil Mahuad, junto a sus
respectivos cancilleres, firmaron el Acta Presidencial de Brasilia, con la que
ambos países se comprometieron a aceptar un histórico acuerdo de paz tras
largos años de conflicto.
Con
la firma del documento se permitió demarcar los 78 kilómetros de frontera en
disputa entre Perú y Ecuador, tal y como estableció el protocolo de Río de
Janeiro de 1942, documento avalado por Argentina, Chile, Brasil y EEUU.
A
la ceremonia, que se celebró en Brasilia, acudieron los presidentes de Brasil,
Fernando Enrique Cardoso; de Argentina, Carlos Menem; de Chile, Eduardo Frei, y
Tomás MacLarty, representante personal de Bill Clinton. Asimismo, los reyes de
España de aquel entonces, don Juan Carlos I y doña Sofía, asistieron como
testigos.