viernes, 23 de diciembre de 2016

LA HISTORIA DE COMITÉS DE AUTODEFENSA CREADOS POR FUJIMORI SEGÚN DECRETO SUPREMO N° 077-DE-92

Durante el primer gobierno del ingeniero Alberto kenya Fujimori Fujimori, se llamó Comité de Autodefensa a las organizaciones de la población rural o urbana, formadas de manera obligatoria y supervisados por el Comando de los Batallones Contrasubversivos para desarrollar actividades de autodefensa contra los grupos subversivos como el Partido Comunista del Perú Sendero Luminoso (PCP-SL), Movimiento Revolucionario Túpac Amaru (MRTA), la delincuencia común, el narcotrafico y para evitar la infiltración de subversivos en sus comunidades. Con la finalidad de defenderse de los ataques de estos y apoyar a las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional del Perú, en las tares de pacificación y desarrollo socioeconómico en las zonas que operaba. En aquellos años el Estado peruano a través de los Comando de los Batallones Contrasubversivos conminó a los campesinos de las comunidades del ande para formar sus comités de autodefensa, les dijeron: "Están con el Estado o están con los terroristas", si un campesino se negaba a integrar el comité de autodefensa o se oponía a la formación del comité, prácticamente ya era considerado como sospechoso y/o terrorista, en algunos casos le sembraban evidencias para capturarlos, luego presentarlos como terrorista.

De acuerdo al Decreto Supremo N° 077/DE-92 del 11 de noviembre de 1992, se denominaron Rondas Campesinas, Rondas Nativas, Rondas Urbanas, Comités de Defensa Civil, grupos de Seguridad y otros, pero en base a las leyes establecidas por el gobierno. Una vez formados los Comités fueron reconocidos por los Comandos Militares de la Zonas de Emegencia, previa autorización expresa del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas del Perú, sus integrantes estaban facultados para hacer uso de las armas, previa autorización del CCFFAA. Los Comités eran asesorados, controlados y apoyados por las autoridades militares y policiales, con quienes coordinaban permanentemente, algunos llegaron a tener himnos, lemas, credos; en teoría el Estado les apoyaba a través de diferentes instituciones publicas, sin embargo en la hora de hechos su aporte de estos civiles siempre fueron ignorados por los gobernantes de turno, especialmente cuando se produjeron muertes, lesiones, invalidez como consecuencia de enfrentamientos contra los subversivos y/o delincuentes comunes.

Sus integrantes en su mayoría fueron varones y algunas mujeres entre los 18 a los 60 años de edad. Los integrantes de los Comités coordinaban para ayudarse en forma conjunta en la autodefensa y sus miembros no descuidaban sus labores agrícolas, ganaderas y faenas; en lugares cercanos dentro de la jurisdicción de las Bases Contrasubversivas, los ronderos permanecieron en sus puestos en estado ecuánime y brindaron sus servicios con trato afable a la población, sobre todo sin cometer abusos ni maltratos físicos indebidos, los mismos que fueron conminados para no mezclar sus creencias religiosas y políticas en asuntos del Comité; sin embargo en lugares alejados, el personal militar y la policía nacional no podía controlarlos por la distancia, sobre todo en las zonas rurales del ande y la selva, donde los ronderos también cometieron muchos abusos y asesinatos, en aquellos tiempos la ronda también tenía su propio calabozo donde depositaban a los detenidos, estos detenidos eran torturados en las noches y durante las horas del día realizaron trabajos forzados como si fueran esclavos en provecho de la comunidad, en algunos casos los detenidos permanecieron depositados por tiempos prolongados por mas de un año. Entre los años de 1982 hasta el año 2000 la ronda fue mas temido que los efectivos de las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional de Perú, muchos subversivos y delincuentes comunes capturados murieron en manos de los ronderos, ahorcados y quemados vivo. 

Los Comités se organizaron por niveles. El primer nivel era un Comité de Base, de una calle, manzana, sector, barrio de una población urbana y si es rural, una comunidad, caserío, aldea, poblado, etc, con su junta Directiva elegidos mediante el voto universal de sus miembros y de la siguiente manera:

* U Presidente o Jefe
* Un Vicepresidente
* Un secretario de Actas
* Un Secretario de Economía
* Un secretario de Organización
* Dos Vocales (Seguridad y Desarrollo).

La clase política peruana, putrefacto, involucrado a través de toda la historia en mega y mediana corrupción, después del ineficiente gobierno del señor Alan García Pérez (1985 - 1990), en esta oportunidad, durante el gobierno delincuencial de Alberto Fujimori, la clase política viendo peligrar sus intereses y su propia existencia, involucró a la sociedad civil para la defensa del pseudo sistema democrático y la pacificación del Perú. En las zonas declaradas como Zonas de Emergencia, los ronderos durante día y noche organizados en grupos permenecian de servicio, controlaban el ingreso y salida de pasajeros en las líneas de transporte, controlaban la salida de sus propios integrantes cuando estos salían fuera de sus comunidades, así mismo este personal conocedor de las zonas de operaciones, integraban a las patrullas del Ejército, algunas veces uniformados y en otros casos como simples civiles, armados con simples retrocargas nos sirvieron como guías, trasportaron a  la espalda provisiones, radios transmisores, municiones de reserva, etc. 

En el año 1994 entre los meses de Junio a octubre trabajé en la Base Contrasubversivo N° 28 del distrito de Agua Blanca provincia de El Dorado San Martín, en este distrito el personal de ronderos en las noches pasaba lista junto con el personal de Tropa, después de la lista de Retreta, 20:00 horas; ellos cubrían servicios toda la noche, organizados en tres turnos, este personal ocupaba sus puestos en todas las entradas y salidas del distrito, la misión que tenían era alertar a la Base ante cualquier movimiento extraño en su sector de responsabilidad, prácticamente ellos cumplían la función de vigía fijo y móvil. Durante los meses que permanecí en este distrito en tres oportunidades salí de patrulla por las zonas de la Mina de Sal, distrito de Rejis, Saposoa, Fausa Lamista, Fausa Sapina, Santa Rosa, este desplazamiento diurno y nocturno duró ocho (8) días, durante estos patrullajes siempre nos acompañaron 5 ronderos, corrían el mismo peligro que el personal militar, sobre todo durante las emboscadas, ellos prestaron sus servicios completamente gratis al Estado peruano. 

En las comunidades del ande y la selva, por el odio y fricción entre ellos, principalmente por problemas de tierras, robo de animales, peleas, unos y otros se acusaban de terroristas, solo por acusaciones de este tipo los denunciados lo mas rápido posible llegaban a la cárcel. Los campesinos acudían a las Bases Militares para poner denuncias involucrando a sus propios familiares, tildándolos de terroristas por motivos de desquite de herencias, tierras y otros, en una oportunidad la señora Matilde Quispe que por años había radicado en la ciudad de Barranca, Lima, cuando retornó a su tierra había encontrado a sus hermanos que toda la tierra de sus padres se habían repartido y ella por venganza a todos sus hermanos les denunció por  el delito de terrorismo, por esta denuncia en el año 1998 la fiscalía mandó a la cárcel a su hermano mayor don Eulogio Quispe, este individuo forzado por los subversivos había apoyado con su camión para el traslado de combatientes del Partido Comunista del Perú Sendero Luminoso, por esta acusación de su propia hermana de sangre el denunciado se fue a la cárcel por lapso de 25 años; muchas situaciones como esta hubo. Solo por denuncias por terrorista el personal militar hacia la captura inmediata, en muchos casos por simple "chisme" sin prueba alguna. Otros denunciantes se dirigían inmediatamente a las rondas campesinas, donde muchas veces encontraban justicia de acuerdo al cosmovisión del hombre andino y pensamiento de ellos. 

En La Guerra Contrasubversiva, desde el año 1980 hasta el año 2000, muchos ronderos perdieron la vida, muchos quedaron mutilados, muchos niños quedaron huérfanos; el aporte de este personal para la pacificación del Perú no fue valorado por la clase política peruana desde os tiempos de Fujimori, hasta Martín Vizcarra; por ende, el Estado y sus tres poderes no han emitido leyes para resarcir e indemnizar y/o dar pensión de guerra a quienes también colaboraron en defensa del estado de derecho y la democracia.
   

sábado, 3 de diciembre de 2016

LA HISTORIA DE LOS OFICIALES DE RESERVA (CAPOR) EJÉRCITO DEL PERÚ

En los años de 1970, en las épocas de alta tensión entre Perú y Chile, el Comando del Ejército en cumplimiento a las disposiciones emanadas por el Gobierno Revolucionario de la Fuerza Armada, ante la escasez de oficiales subalterno del grado de subteniente, alférez y tenientes, mediante Decreto Supremo creó la ley de captación de oficiales de reserva denominado (CAPOR), personal que se requería con urgencia para cubrir los cuadros orgánicos de los batallones de combate, según Coeq, completamiento del personal según los planes para la invasión a los territorios peruanos en cautiverio en poder de Chile para recuperar la provincia de Arica y departamentos de Tarapacá y Antofagasta. La captación de oficiales se realizó de dos procedencias: Oficiales de reserva captados desde la Tropa y la otra fue procedente de los colegios militares, como requisito indispensable fue tener talla mínima 1.70 de estatura, quinto año de educación secundaria y buena conducta; el personal escogido en los batallones y en los colegios militares se presentaron en la Escuela Militar de Chorrillos en Lima, donde recibieron curso acelerado por lapso de seis meses para cumplir funciones como Jefes de Sección y comandantes de patrulla, finalizado el curso este personal retornó a la Unidades con el grado de subteniente de ingeniería, infantería, artillería. 

En aquellos tiempos las companías se encontraban bajo el comando de un capitán y todas las secciones bajo el comando de oficiales del grado de subteniente y/o teniente, a los suboficiales no les correspondía ejercer estos puestos, pues ellos se dedicaban netamente a sus respectivas especialidades en la parte técnica, especialidades como zapadores, minadores, tractoristas y lanzadores de puentes, etc.

El 3 de enero de 1977, en horas de la tarde me incorporé como voluntario para cumplir con el Servicio Militar en el Batallón de Ingeniería de Combate Motorizado "Huascaran" N° 112, acantonado en el distrito de Caraz, Huaylas, Ancash. En horas de la mañana también habían llegado procedente de la ciudad de Lima ocho (8) subtenientes de reserva, flamantes oficiales del arma de Ingeniería, y uno de ellos fue el subteniente Freddy Nauchi Paz. Freddy Nauchi Paz culminó su educación secundaria en el Colegio Nacional de "La Libertad" de Huaraz en el año de 1975 y con fecha 03 de de enero del año 1976 se presentó como recluta al Batallón de Ingeniería de Combate Motorizado "Huascaran" N°112, finalizado su reclutada con el grado de soldado SMO pasó a la Companía Comando y Servicios donde se desempeñaba como adjunto del almacenero de armamentos, puesto donde había demostrado disciplina y mucha responsabilidad. En el mes de junio del año en curso fue escogido para ser oficial de reserva, previo un examen y visto bueno del comandante de batallón fue seleccionado junto a un grupo de clases y soldados para viajar a la ciudad de Lima donde iniciaron el curso acelerado para ser oficial en modalidad de (CAPOR). El 31 de diciembre del mismo año se recibieron como oficiales de reserva y retornaron a la guarnición de Caraz.

El 7 de enero, tres flamantes subtenientes de reserva supervisado por el subteniente de escuela Juan Traverso se presentaron para la instrucción a los 180 reclutas que pertenecían a mi promoción, entre los nombrados estaba el subteniente Freddy Nauchi Paz, cuando el grupo de oficiales se colocaron al frente del contingente de reclutas, viendo a Nauchi, entre mi dije ¿que ven mis ojos, creo que estoy soñando, si decían que Nauchi aun era soldado y como resulta como subteniente? con esas interrogantes en mi cabeza permanecí en las horas de instrucción, él como sus demás compañeros con su bastón de instructor en la mano se la daban de gritón y muy estricto en la instrucción, yo que le había conocido en el Colegio Nacional de "La Libertad" como abanderado en la escolta del colegio; en horas de la instrucción en mi condición de recluta le miraba asustado y sorprendido, en todo momento cumplí sus ordenes sin dudas ni murmuraciones. Aquel día los instructores y los monitores nos masacraron bien, la instrucción fue muy exigente e intenso, por cualquier falta o desgano del personal, nos hacían ranear, rampar, rotar, el personal que no podía gritar como castigo comió tierra, algunos que soltaban el fusil Fal durante la carrera como castigo recibían patadas en la posición de 20 uñas, etc. Finalizado la instrucción, al medio día, todos sudorosos, con el uniforme empolvado y cantando canciones militares ingresamos al cuartel con dirección al patio de armas, donde formamos, después de algunas indicaciones el jefe del curso ordenó romper filas y corrimos hacia las cuadras para guardar nuestros fusiles FAL en los armeros, en todo momento los monitores siempre nos decían: " perros están lentos, perros están lentos", "los tres últimos mueren, los tres últimos mueren" normalmente en estas situaciones nadie quiere ser último; como reclutas, todos asustados salimos de las cuadras y corrimos hacía el patio en ropa de deporte, es ahí que a los tres últimos los sargentos monitores les decían: "perros, por lentos van a morir como Caopolicán", "¿saben cómo murió Caopolicán?, con respecto a la pregunta muchos de mis promocionales, todos asustados no respondieron por miedo e ignorancia. 

Para iniciar la gimnasia básica sin armas de 10 repeticiones cada uno, los oficiales instructores se pusieron al frente con su ropa de deporte blanco y nosotros en el patio de armas con el típico vestimenta de deporte verde (tipo Tropa), finalizado la gimnasia salimos del cuartel para correr por la pista con dirección al distrito de Yungay y llegamos hasta el puente que cruza hacía el distrito de Pueblo Libre, ida y vuelta en total recorrimos 16 kilómetros, en el trayecto el sargento 2do monitor Víctor Solis, conocido como el "mira con truco" a todo pulmón se lucía cantando canciones como: " Pinochet hijo de puta, una noche bien oscura saltaremos en Santiago, chilenitas, chilenitas comeremos; uno, dos, tres, cuatro; cuatro, tres, dos, uno; quiero bañarme, (bis), en una piscina, llena de sangre, sangre chilena, sangre de roto, sangre araucano, sangre miserable..."


En aquellos tiempos también, procedentes de la ciudad de Lima de vez en cuando aparecían tres aviones de combate MIRAGE F5 Francés, estas naves rompiendo el silencioso espacio aéreo del Callejón de Huaylas, realizaban piruetas sobre el cielo del distrito de Pueblo Libre que está al frente de distrito de Caraz, tiempos en que poseíamos como armas individuales de dotación a los fusiles FAL, la ametralladora UZI y como arma colectiva a la ametralladora MAG, todos fabricados en Bélgica, en su totalidad casi nuevo, además el lanzacohetes RPG adquirido en Rusia. Todas las armas de esa época se encontraban nuevos, adquiridos durante el gobierno revolucionario del General Juan Velasco Alvarado.


Los oficiales natos egresados de la Escuela Militar de Chorrillos, le trataban a los oficiales de procedencia reserva como si fueran "harina de otro costal", siempre les miraban de reojo y muchos decían "juntos pero no revueltos"; los suboficiales y el personal de tropa también no mostraban respecto tan igual como a los oficiales de armas, es que hubo muchos celos y envidias, porque este personal de un momento a otro había cambiado de status, pues del grado de tropa y otros procedentes de colegios militares rápidamente pasaron a ostentar el grado de oficial (subteniente y/o alférez). En la guarnición de Caraz, un día en la hora de lista de Diana el suboficial de 1ra MA de 59 años de edad, Luis Castellanos Aragonés, dijo: "Mi comandante, yo no voy a saludar al soldado Nauchi Paz, quien fue mi almacenero y que ahora ostenta el grado de subteniente, un grado que le ha regalado el Comando del Ejército", concluyó totalmente ofuscado; por este tipo de roces y reacciones hubo algunos problemas y como consecuencia el subteniente Nauchi le sancionó con dos días de arresto simple al mencionado suboficial, cuyo motivo fue: "Falta de respeto al superior" papeleta de sanción que se la remitieron hasta el Cuartel General del Ejército en Lima para ser incluido en su LP. 

En el Batallón de Ingeniería de Combate Motorizado "Huascaran" N° 112, los oficiales de armas, los suboficiales y la tropa siempre murmuraban del pésimo desempeño de estos oficiales novatos, cuyo grado de subteniente les quedaba muy grande por sus escasos conocimientos obtenidos en un curso acelerado de seis meses, por ende en algunos casos en las horas de la "lista de diana" el mayor Torres, oficial de instrucción (S-3) del Batallón decía: "Teniente Alberto Cordero a partir de la fecha usted como oficial graduado como comando, tendrá la misión de formar bien a los subtenientes de reserva, porque estos oficiales están pésimamente mal formados y están peor que la tropa, este personal todos los días debe estar junto con los reclutas, ahí quiero verlos a todos para que aprendan sobre todo el sembrado de minas, lanzamiento de puentes, etc". A los oficiales de reserva el personal de Tropa, que en su mayoría eran sargentos muy experimentados y cachacazos, le pusieron el sobre nombre de "corchos" que es una jerga militar que significa ineptos. 

El 30 de enero de 1989, durante las luchas contrasubversivas en Ayacucho, el teniente de reserva Freddy Nauchi Paz, durante una revista de prendas y equipos de campaña dentro de la cuadra de Tropa le agarró a golpes a un sargento y este que se encontraba armado inmediatamente cargó su fusil FAL y le disparó en la cabeza al mencionado oficial, quien había muerto en el acto, este oficial dejó un hijo y una viuda muy joven en el distrito de Caraz, Huaylas, Ancash. 

Yo he tenido la oportunidad de trabajar con cientos de oficiales de reserva sobre todo en el norte del Perú, en la 9na División Blindada Tumbes y la 8va División de Infantería Lobitos. Nunca se me borró de la mente sobre todo las reclutadas que cometía el inepto subteniente de ingeniería de procedencia reserva de nombre Antonio Anglas que conocí en el Batallón de Ingeniería de Combate "Machupichu" N° 211, distrito de Corrales en Tumbes en el año 1984. 

Como la Guerra con Chile se había truncado por la traición del General Francisco Morales Bermudez, en el año de 1982 cancelaron la captación de oficiales de reserva, pero habían quedado muchos; estos oficiales fueron marginados, no tuvieron la misma oportunidad que los oficiales de armas para ascender al grado inmediato superior, en los cuarteles se veía muchos tenientes de 35 años de edad, capitanes de 45 años de edad, algunos llegaron a ser comandantes pero no ejercieron la jefatura de Unidad, unos cuantos llegaron a ser coroneles, grado máximo. 


En el año 2012 el Comando del Ejército peruano pasó a la situación militar de retiro a todos los oficiales de procedencia reserva captados desde el año 1972 hasta el año 1980.